Viajamos cuatro dias dos matrimonios con niños, solo puedo decir que fantásticos dias, un sitio idilico, acojedor, que invita a la reflexión, se siente la paz, y se recarga uno de energía, solo puedo decir que me he enamorado de la Peña de la Ventana. LAs casas perfectas, no les falta detalle, para el buen tiempo tiene una piscina de ensueño que se confunde con la naturaleza y como novedad la dueña (Toñi) nos mostró una nueva sala que van a dedicar a formación, reuniones, etc., y por cierto esta perfectamente montada y no le falta detalle.
En cuanto a los dueños, que voy a decir, Toñi siempre atenta, servicial y muy buena conversadora, y sus hijas hicieron tal amistad con las nuestras que ahora quien nos recuerda que hay que volver son nuestras niñas.
Toñi, muchas gracias por todo, un abrazo de Conchi, Susana, Julio y ´Martín (un servidor), ah y un beso de los peques.