Es un sitio idílico para pasarlo bien tanto mayores como pequeños. Fuimos un grupo de amigos con 8 familias en agosto, un total de 26 personas, 15 adultos y 11 niños. Pudimos meter a los niños perfectamente en las dos habitaciones grandes de 5 y 6 camas sin problemas. Las 7 parejas y un single en las 8 habitaciones restantes. Todas las habitaciones con baño. La casa estaba muy limpia, tenía todos los detalles posibles vajilla completa, internet, televisión digital para ver el fútbol, ping pong, futbolin, billar, pista de fútbol y canasta de basquet, y un minigolf que disfrutamos mayores y pequeños a tope. Todo tipo de balones para jugar al futbol, baloncesto, voleyball, etc. Una piscina fantástica con 10 hamacas al lado de la barbacoa con su sombrita. El sitio es precioso, por la noche hace fresquito y se duerme muy bien y tiene tres entornos para comer o cenar, el porche fuera, dentro de la casa y en la zona de barbacoa. El catering que nos aconsejó Marta muy bien, puntual y venían hasta la casa y a buen precio. Nos ha encantado la casa y el entorno, precioso para hacer trekking. Difícil de superar. Seguir así y esperaremos volver
Ah por cierto y como bien avisan ellos, el camino de tierra de 4 km se tarda unos 10 minutos en subir. Desde la plaza del pueblo hasta la casa son unos 20 minutos. El camino esta bien para subir aunque sea un camino de montaña pero merece la pena subir con el entorno que te encuentras después